Aceptar con serenidad la vejez de los padres

28 mayo 2019

Sin ninguna duda, a la gran mayoría nuestros padres nos parecen auténticos héroes. Pero a medida que pasa el tiempo, nuestros padres van envejeciendo y teniendo dificultades para su vida diaria. Entonces nos damos cuenta de que se han hecho mayores, y que no estamos preparados para afrontarlo. Se vuelven vulnerables y adquieren hábitos y manías que antes no tenían.

Es en ese momento cuando aceptamos que hay que cuidarlos y mimarlos, preocuparnos de que estén lo mejor posible, respetándolos y protegiéndolos, porque aunque están frágiles y olvidadizos siguen siendo nuestros padres.

Lo difícil es aceptar que nuestros héroes ya no tienen el control de la situación y en ocasiones podemos sentirnos irritados y tristes ya que no gestionamos bien los sentimientos encontrados que sentimos.

La verdad es que no somos capaces de aceptar con serenidad el hecho de que adoptan un ritmo más lento con el pasar de los años, nos irritamos al ver que no son indestructibles como los súper héroes y que se acerca cada vez más el momento de la despedida. Al final, nuestros enfados, solo provocan más tristeza a aquellos que un día solo procuraron darnos alegría.

El tiempo nos enseña a sacar provecho de cada etapa de la vida, pero es difícil aceptar las etapas de los otros… más cuando los otros fueron nuestros pilares, aquellos para los cuales siempre podíamos volver y sabíamos que estarían con sus brazos abiertos y que ahora están dando señales de que un día irán a partir sin nosotros.

Hagamos por ellos hoy lo mejor, lo máximo que podamos para que mañana cuando ya no estén los recordemos con cariño, sin necesidad de arrepentimientos posteriores que ya no servirán para nada.

Fuente: www.pildorasdefe.net

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