Diferentes alternativas a la cremación y el entierro

08 junio 2021

En la industria funeraria se ofrece una variedad de servicios alternativos al entierro y la cremación, basados en el máximo respeto y cuidado del medio ambiente: cementerios ecológicos, los ataúdes biodegradables y la hidrólisis alcalina.

Los servicios funerarios ecológicos ofrecen productos y tratamientos del cuerpo que disminuyen al máximo la huella ecológica.

Urnas Biodegradables: están hechas de materiales naturales de fácil integración con la naturaleza y son decoradas con pinturas a base de agua evitando cualquier tipo de contaminación en el medio ambiente. Estas urnas poseen múltiples beneficios para quienes desean un funeral que sea respetuoso con la naturaleza. El producto posee un rápido proceso de descomposición sin dejar ninguna huella ecológica, tiene un costo menor que las urnas tradicionales y hay diferentes tipos, formas, tamaños y materiales que pueden ser personalizados.

Ataúdes Biodegradables: no se necesita embalsamar el cuerpo, ni realizar tratamientos químicos de la tierra. Son ataúdes de cartón reciclado reforzado que se suelen incorporar a la tierra entre los 6 y 12 meses después de su entierro. Estos ataúdes pueden ser utilizados en las cremaciones y su precio es más económico que los ataúdes convencionales. Los ataúdes biodegradables sólo pueden llevar un peso limitado y no son aceptados en todos los cementerios.

Cementerios Naturales: consisten en enterrar el cuerpo con ataúdes ecológicos de forma que permita una respetuosa integración con la naturaleza. En este caso el cuerpo no recibe tratamiento con químicos conservantes ni desinfectantes. Tampoco son utilizados herbicidas, fertilizantes sintéticos o pesticidas. Las lápidas y placas de metal o acero son reemplazadas por árboles, plantas, rocas o flores naturales de la zona.

Hidrólisis Alcalina: se coloca el cuerpo en un cilindro a presión junto con hidrólisis alcalina y agua a 170 grados para acelerar la descomposición natural del cuerpo sin liberar sustancias tóxicas. Después de dos o tres horas el cuerpo se descompone químicamente transformándose en cenizas y en un líquido estéril libre de ADN que se devuelve al ciclo natura del agua.

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